Medio Ambiente cuestiona rutas de navegación del proyecto minero portuario Dominga

En la zona de Totoralillo se emplazarían las instalaciones portuarias del proyecto Dominga.

El documento es parte de los insumos que tendrá en cuenta el comité de ministros que deberá definir si aprueba o rechaza la viabilidad ambiental de la propuesta de la minera Andes Iron.

El impacto en la fauna marina y costera que tendría en la zona el tránsito de los barcos es uno de los elementos que argumentó el subsecretario del Medio Ambiente, Maximiliano Proaño, en un informe sobre el proyecto minero portuario Dominga.

El documento forma parte de los análisis de distintos servicios púbicos que van a tener en cuenta los integrantes del consejo de ministros que deberá pronunciarse sobre la viabilidad ambiental del proyecto de Andes Iron.

En la parte del proyecto que involucra la construcción de un terminal para embarcar mineral en el área de Totoralillo, comuna de La Higuera, el informe cuestiona las mediciones de emisiones de contaminantes al aire.

Y en cuanto a la navegación por la zona de los barcos que transportarían el mineral se señala que la empresa no consideró dentro de su área de influencia las zonas utilizadas por especies como el pingüino de Humboldt, el pato yunco y el chungungo por lo que no se puede posible descartar impactos significativos en el ecosistema. También alerta sobre la insuficiente información de línea de base en lo que respecta a los cetáceos.

El proyecto de Andes Iron implica una inversión de US $ 2.500 millones para la producción de concentrado de hierro y concentrado de cobre en la comuna de La Higuera, región de Coquimbo. El proyecto considera construir instalaciones portuarias para embarcar el mineral en el sector de Totoralillo, con muelle, duques de alba y sistemas de captación de agua y evacuación de salmuera al mar.

La minera estima un tránsito de 56 embarcaciones al año, a 18 kilómetros por hora y a más de 20 de distancia de la reserva Pingüino de Humboldt.

La viabilidad de la inversión será determinada por la decisión que tomen los integrantes del comité de ministros, que es una instancia de revisión administrativa de la pertinencia ambiental.

El proyecto minero portuario fue rechazado el 2017 por el servicio de evaluación ambiental, pero una orden de los tribunales derivó la decisión al comité de Ministros que debería votar próximamente.