¿Cuál es la importancia del hidrógeno verde?

En la instantánea vemos turbinas de viento en los campos de Alemania.

El hidrógeno verde es una materia prima clave entre los combustibles renovables. Aquí revisamos algunas de sus ventajas e inconvenientes para el transporte naviero a futuro.

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Este elemento químico, uno de los más abundantes en nuestro universo, conforma el 75% de la materia visible. Es el material más ligero de la tabla periódica y posee un solo electrón en su estructura molecular. Un artículo del sitio web de la empresa noruega fabricante de equipos eléctricos para el sector energético y marítimo Wärtsilä (léase Waertsile), ilustra muy bien la relevancia estratégica de su desarrollo como combustible del futuro para el transporte naviero.

Para empezar, su utilización en procesos industriales es de larga data. El refinado del petróleo depende del hidrógeno para eliminar el azufre de los combustibles. También es utilizado como reductor reactivo y oxidante en los procesos metalúrgicos. Actualmente desempeña un rol clave en la producción de dos de los combustibles sin huella de carbono: el amoníaco y el metanol. Otro dato muy llamativo citado es que sin el hidrógeno como combustible, no habríamos podido enviar tripulaciones ni cargas al espacio.

Video: Gentileza de Fundación Chile.

Ahora bien, ¿cuál es la situación del hidrógeno como combustible para barcos utilizados en el transporte marítimo? De acuerdo a Jussi Mäkitalo, Director de Desarrollo de Negocios de Wärtsilä, "la producción mundial de hidrógeno fue de unos 70 millones de toneladas en 2018. Actualmente casi todo el hidrógeno se produce en (o muy cerca) de donde se necesita, y se dirige a procesos industriales, por lo que no se transporta en barcos de la misma manera que, por ejemplo, el GNL".

Mathias Jansson, Director de Sistemas de Suministro de Gas Combustible de Wärtsilä Marino, sostiene otro aspecto a considerar: "Desde el punto de vista normativo, el mayor reto es que sencillamente no existen normas relativas al uso del hidrógeno como combustible para el transporte marítimo. El Código IGF establece requisitos de alto nivel para el uso de combustibles de bajo punto de inflamación, como el hidrógeno, en aplicaciones marítimas, pero hasta la fecha se ha aplicado sobre todo a proyectos con GNL. En la Organización Marítima Internacional se está trabajando para añadir el hidrógeno al código, pero aún se encuentra en una fase muy temprana, y se espera que el proyecto de propuestas se presente a finales de este año o, como máximo, al inicio del próximo".

Por otro lado, queda la interrogante sobre las ventajas y desventajas de uso en propulsión naviera. Jussi Mäkitalo señala que "en comparación con el funcionamiento con diésel, se supone que las emisiones de CO2 de un tubo de escape son mucho más bajas o incluso inexistentes cuando se utiliza el hidrógeno como combustible; si hablamos de hidrógeno ecológico, se espera que las emisiones sean también mucho más bajas. Por el lado negativo, utilizar el hidrógeno directamente como combustible en lugar de utilizarlo como materia prima para fabricar otros combustibles renovables requiere mucho espacio a bordo".

Kaj Portin, Director General de Combustibles Sostenibles y Descarbonización, aporta datos muy útiles para concluir: "Incluso como líquido, el almacenamiento de hidrógeno ocupa un espacio considerable en comparación con el gasóleo marino. Para obtener el mismo contenido energético equivalente se necesita un volumen de depósito casi ocho veces mayor que el del gasóleo marino. El almacenamiento de hidrógeno líquido y comprimido en tierra ya existe, por lo que existe una tecnología que puede adaptarse a las aplicaciones marítimas”.