Desde 1985 el dique flotante de Sociber en Valparaíso ha atendido 1027 varadas

Operarios del dique flotante trabajando en el sistema de propulsión de una embarcación. En la empresa destacan los niveles de seguridad y calidad en su gestión.

Con una alta demanda de trabajos en buques pesqueros, wellboats, naves mercantes, petroleros e incluso unidades de la Armada se desarrolla el trabajo en el dique flotante de Sociber.

Publicado Actualizado

La empresa es propiedad en partes iguales de Asmar y de Navantia S.A., un gigante español en la industria de los astilleros. Ambas se unieron para reemplazar al dique flotante Valparaíso II que se hundió en 1980. Desde 1985, el actual dique está en la misma posición que ocupaba su antecesor en la bahía de Valparaíso, donde su figura forma parte de la postal porteña.

Hace justo dos años el ex oficial de la Armada e ingeniero naval mecánico Sidney Chellew asumió la gerencia general de Sociber con la misión de profundizar los factores diferenciadores de la empresa (plazo, precio y calidad) y buscar nuevas áreas de negocios.

Entre las tareas más frecuentes que realizan en el dique flotante se cuentan la mantención del casco de las naves, pintura, arreglo de hélices, cañerías, válvulas, confección de estructuras metálicas y reparaciones. Sidney Chellew bromea diciendo que parte importante de su labor es eliminar la corrosión “y mientras esta exista vamos a tener negocios”.

Sidney Chellew pasó 36 años en la Armada y ejerció como director nacional de Asmar. Hace dos años es gerente general de Sociber.

El dique flotante tiene 150 metros de largo, un ancho útil de hasta 24 metros y puede sostener hasta 9.500 toneladas. No todas las embarcaciones sometidas a trabajos ingresan a la estructura porque se puede trabajar con naves amarradas a su costado a través de un sistema de boyas. Y también los profesionales y operarios de la empresa se trasladan a otros puertos donde necesiten de sus servicios.

“En nuestra historia llevamos 1.027 varadas de embarcaciones de todos los tamaños. El año pasado en una operación inédita vararon cuatro pesqueros de 20 metros al mismo tiempo, pero lo normal es tener dos embarcaciones en el dique o una grande. Por ejemplo, atendemos los RoRo de Navimag y muchos wellboats de la industria salmonicultora”, cuenta el gerente de la compañía.

Destaca las múltiples certificaciones que puede exhibir Sociber -ISO, NKK, ISPS, OHSAS- que dan cuenta de las exigentes normas de calidad y seguridad que la rigen; y los tiempos de cumplimiento de los contratos que en promedio permiten tener antes de 20 días un buque en condiciones de volver a navegar.

También elogia al equipo que trabaja en la empresa, que reúne los conocimientos de la tecnología avanzada y los tradicionales secretos del oficio aprendidos tras años de práctica.