Cadena de Frío: Factor estratégico en un mercado global cada vez más exigente

La cadena de frío garantiza calidad y seguridad en la industria logística.

En la industria logística actual cualquier detalle que quede al azar puede significar millonarias pérdidas y en este sentido la cadena de frío aparece como factor clave tanto para el comercio exterior como para la cadena de suministros.

En la cadena logística moderna, la conservación adecuada de productos perecederos y sensibles a la temperatura es un factor clave a la hora de garantizar seguridad, viabilidad comercial y sobre toda lo seguridad para el consumidor final. Así, la cadena de frío se convierte en un componente importante a la hora de mantener control sobre la temperatura desde el punto de origen hasta el destino final. Si pensamos en el comercio exterior, es fundamental, por ejemplo, en los envíos de salmones y cerezas ya que cualquier detalle que se escape puede significar millonarias pérdidas.

Y no solamente en la industria alimentaria. Para graficar, una infinidad de vacunas necesitan estar almacenadas a temperaturas que van desde los 8 grados a -70 grados Celsius. Si se pierde la cadena de frío todo ese cargamento quedará inutilizado provocando no solo pérdidas económicas, sino que un problema importante de salud pública. “La cadena de frío es fundamental hoy en día porque garantiza la conservación y preservación de productos sensibles a la temperatura a lo largo de toda la cadena de suministro, desde la producción hasta el consumidor final”, explicó Rodrigo Dourojeanni, gerente general de Goldenfrost.

El tema es que, mediante el control y la gestión de la temperatura, se asegura que estos productos mantengan sus propiedades, calidad e inocuidad. Esta capacidad de preservar la calidad permite que los productos puedan ser distribuidos a nivel global, ampliando el acceso a una mayor variedad de bienes para los consumidores y eliminando barreras geográficas para los productores. “La cadena de frío tiene un impacto significativo en áreas como la seguridad alimentaria mundial, al reducir las pérdidas y el desperdicio de alimentos perecederos”, sostuvo.

Por su parte, Cristian Hozven, gerente general de CNX Chile y director de ALOG, indicó que “la cadena de frío hoy día está tomando un valor muy importante por el tema de la calidad del producto que se está despachando. Nosotros estamos vendiendo productos premium y Chile se ha hecho un nombre, tanto en la parte de las cerezas como en el salmón, sus principales productos. Tenemos una imagen en el exterior que se valora y donde se paga un buen precio por esos productos, entonces la carga tiene que llegar en buenas condiciones”.

Por ejemplo, en la industria del salmón este producto debe llegar con un buen color y olor. Actualmente el importador o el consignatario, es una persona que se ha profesionalizado en la recepción del producto. A todo el cargamento que llega a destino se le realizan una serie de exámenes, controles de temperatura y medicines del color. Misma situación que las cerezas donde la cadena de frío es clave para mantener la consistencia y el sabor, y la logística debe estar alineada con estos factores.

“Hay que dar la seguridad al exportador de que la carga va a tener un buen trato y va a llegar en buenas condiciones al destino final. Tanto así que actualmente existen ciertos parámetros donde si aumenta la temperatura, la carga derechamente se cancela o se baja considerablemente el valor del precio. Hay una consecuencia comercial, un perjuicio económico, y en ese sentido la logística tiene que entregar los resultados y la respuesta para que el exportador no tenga estos problemas”, explicó Hozven.

En base a la importancia que tiene la cadena de frío, se están implementando nuevas tecnologías que permiten monitorear y garantizar la temperatura adecuada durante el transporte como los Data Loggers, dispositivos que registran la temperatura a intervalos regulares y donde algunos modelos pueden descargar los datos a una computadora para su análisis posterior. También se encuentra el monitoreo en tiempo real donde tecnología GPS y sensores conectados a internet se encargan de monitorear continuamente la temperatura y enviar alertas instantáneas si hay un cambio fuera del rango establecido lo que permite tomar acciones correctivas de manera rápida y eficiente.

También destacan los sensores inalámbricos que pueden instalarse dentro de los contenedores de carga para el envío continuo de datos de temperatura o dispositivos IoT capaces de integrar múltiples sensores que no solo monitorean la temperatura, sino también otros factores ambientales como la humedad y la luz. “Todas estas tecnologías combinadas permiten a las empresas mantener un control riguroso sobre la temperatura de los productos durante el transporte, mejorando la eficiencia y reduciendo el riesgo de pérdida de calidad o seguridad”, explicó Rodrigo Dourojeanni, gerente general de Goldenfrost.

Otro punto importante, a juicio del ejecutivo, son las mejoras en la infraestructura de industrias como las empresas de telecomunicaciones más el desarrollo e innovación de dispositivos, procesos e instrumentos han generado mejoras significativas en la trazabilidad y control en tiempo real de la cadena logística que permiten “tener información detallada e incluso en línea, desde el origen hasta el destino final de cualquier producto incluyendo la ubicación, la temperatura o la humedad. El control y monitoreo de estos parámetros incluso puede generar adecuaciones en tiempo real, automatizadas o dirigidas, para evitar desviaciones fuera de los rangos definidos como tolerables”.

Sobre las proyecciones en la industria de la cadena de frío, Rodrigo Dourojeanni estima que son “auspiciosas porque, en particular, vemos que el mercado seguirá moviéndose hacia un crecimiento importante donde la innovación, la especialización y la complejidad serán cada vez mayores”. Mientras, Cristian Hozven cree que la predicción de crecimiento estará enfocada en el tema de la importación porque “mientras mayor sea más fuerte estará la región sudamericana en general porque va a haber una mayor cantidad de cargueros, una mayor cantidad de oferta aérea”.